El Cúmulo de las Fauces era una peligrosa región sin cartografiar. También conocido como Las Fauces, estaba formado por un grupo de agujeros negros que podían confundir a las computadoras de navegación. Sus grandes pozos de gravedad atraen a las naves y otros cuerpos cercanos a su interior y los atrapan sin escapatoria. El peor y más grande de todos ellos era conocido como Las Fauces.
El planeta de Kessel se sitúa justo en medio de la Vorágine Akkadese, y solo el Corredor de Kessel es la ruta de entrada y salida. Kessel es un planeta rico en especie, droga que controla su extracción y comercialización, el Sindicato Pyke. La teoría es que los desechos de las singularidades se acumularon durante eones formando la masa planetaria. Para el Sindicato, esta ruta, el Corredor de Kessel, era segura y protegida gracias al Cúmulo de las Fauces, donde ningún piloto se atrevería a adentrarse.
El Corredor de Kessel
El Corredor de Kessel es una de las rutas más utilizadas por contrabandistas y piratas. Es utilizado sobre todo, para transportar la especie que se extrae de las Minas de Kessel y que controla el Sindicato Pyke. Obviamente, estos contrabandistas lo hacen a espaldas del Sindicato, y del Imperio, quien permite el comercio de los Sindicatos a cambio de determinados acuerdos. El Corredor de Kessel es una ruta hiperespacial de 20 parsec. Según el propio Han Solo, el Halcón Milenario recorrió el Corredor de Kessel en «menos de doce parsec».
Esto lo vemos, tras años de misterio, en el spin-off ‘Solo: Una Historia de Star Wars’. Aquí comprobamos como recorre en el Corredor de Kessel escapando de un destructor estelar Imperial. Aunque realmente es un tecnicismo, ya que lo hizo en más de doce. Pero redondeando hacía abajo se queda en «menos de 12».
Frikipolitas, si os ha gustado el post, no os perdáis la próxima entrega del Blog, donde seguiremos pilotando por este gran y maravilloso universo de Star Wars.
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